Es especial desde el amanecer hasta el anochecer, se respira en la atmósfera un ambiente positivo, comenzamos a recibir felicitaciones por los distintos medios de comunicación en los que estemos registrados y en el mundo físico, están los gestos, las palabras amables y otros detalles que nos hacen sentirnos bien, el rostro se nos ilumina, al ver y sentir toda esa buena vibra.
Cada noche que nos disponemos a dormir y no sabemos si despertaremos al siguiente día nunca olvidemos de hacer una pequeña oración y dar las gracias a Dios, por todo lo que ha llegado a nuestra vida, incluso por aquellas cosas que aparentemente no nos parecen buenas (mala salud, problemas financieros y otras cosas), independientemente a la religión que pertenezcamos o sendero espiritual que practiquemos. porque como lo dicen las sagradas escrituras todo tiene una razón de ser.
y al despertar en cada nuevo día consideremos lo como que si fuera nuestro cumpleaños, al tomarlo de esa manera viviremos de nuevo un día único y especial en nuestra vida. Mas otros requerimientos que debemos de cumplir para acercarnos a Dios y a la verdadera felicidad.
Oro a Dios para que nos continué Bendiciendo.
Muchas Gracias de Nuevo!
Con afecto:
Manuel Herrera.
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